El centro de la ciudad con su historia, edificios, negocios y visitantes es un motor económico y un reclamo turístico que da vida a la ciudad.
De toda la vida, ir al centro de la ciudad a echar un ojo, darse una vuelta para comprar, encontrarse para divertirse o tomar algo ha sido una tradición ininterrumpidamente.
No solo para la gente local sino también para todo tipo de visitantes y turistas, nacionales e internacionales.
Junto a los comercios tradicionales que aportan alma y solera al centro, muchas primeras marcas y negocios de primera línea arden en deseos de tener un espacio comercial dentro porque saben de la importancia de contar con este incomparable escaparate.
Sin embargo, y como en el resto de zonas comerciales de la ciudad, los negocios del centro se han visto afectados por la pandemia, con los cierres y la demanda de continuas medidas de seguridad e higiene, y por los cambios en los hábitos de consumo que ha conllevado, con el aumento del comercio electrónico.
Frente a estos cambios y temores, los comercios del centro han ido respondiendo, no sin grandes esfuerzos por parte de sus propietarios o encargados, incorporando todo tipo de facilidades e innovaciones que mejorasen la seguridad y la experiencia del cliente, sin perder por ello su esencia y atención personalizada.
Desde el reacondicionamiento del espacio por dentro y fuera del establecimiento, hasta la digitalización de servicios, la disposición de opciones más rápidas y diversas para comprar y pagar, el delivery, una mayor atención al detalle e interiorismo audiovisual, reclamos y dinamización exterior, etc. Todo lo necesario para adaptarse al nuevo escenario y seguir dando vida al centro y que todos lo puedan seguir disfrutando.
Gracias a este compromiso, muchos siguen apostando por el centro para su día a día. Su ubicación y conectividad en un marco incomparable donde se puede disfrutar en vivo de una amplia y diversa oferta de productos y servicios, la hace diferente al resto dando vida a la ciudad. Y sus negocios, clientes, paseantes y visitantes, también. Como los cajeros de Euronet.
Desde nuestros comienzos confiamos en los negocios del centro para estar cerca de nuestros usuarios y clientes cuando lo necesiten. Lo hemos hecho durante la pandemia y lo seguimos haciendo ahora. Porque todos juntos, damos vida al centro de la ciudad.
¡Vive el comercio del centro!
Oscar Villa, EEFT Spain
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